Las puertas de la catedral de Burgos
Fernando Pérez del Río
Negarás tres veces antes de que cante el gallo.
La primera: lo suyo sería plantear un concurso público supervisado por expertos para este proyecto, en el siglo XXl se estila la participación ciudadana en las decisiones y no “el dedo”, sabemos que la seo es propiedad de la Iglesia y ellos deciden, sin embargo, les guste o no, la catedral es un símbolo de todos, y estas maneras antiguas de hacer las cosas han enervado a la ciudad.
Analizando con más detalle, estamos de acuerdo en ayudar a la conservación y restauración de una catedral siempre inacabada, pero la iniciativa así planteada provoca recelo y mi primera negación.
La segunda: En las puertas se quiere representar el génesis, y el artista elegido, Antonio Lopez, se ha inspirado en él y su familia, no obstante, la ciudad se ha sobresaltado cuando ha descubierto que la imagen de Dios de la puerta central es ni más ni menos semejante al propio artista.
De otra mano, me entra la risa floja cuando recuerdo las conferencias del maestro del hiperrealismo proyectándose a sí mismo con extraordinaria “humildad”, “sencillez”, incluso “candidez” y después usa la catedral como álbum familiar.
Me pregunto por qué quiere poner su rostro precisamente en la puerta del perdón, es un interrogante que no acabo de entender… ¿Nos quiere perdonar como el santísimo o se quiere perdonar a sí mismo?
A su favor, hay que reconocer que este artista se suele inspirar en su familia; los artistascon frecuencia se proyectan en sus obras de infinitas formas y no hay nada de malo en ello, si bien al hecho de utilizar la catedral como un inmenso fotomatón familiar le doy mi segunda negación.
Tercera: Vaya por delante mi reconocimiento al talento de Antonio López. Este proyecto transgresor, desde luego no deja indiferente a nadie y las puertas, sin duda, son una obra “diferente” “majestuosa” que puede gustar o no. Al final, nos queda una controversia de lo más interesante, ya que pocas veces se debate sobre arte, así que la tercera negación la dejo en sus manos ¿a Vd, le gusta o no?
1 comentario. Dejar nuevo
Temo que nos vayamos a arrepentir de esto décadas.